Peléandome con mi sombra...

Peleándome con mi sombra, disputo entre los grises y los verdes… me acorralan en este ambiente cargado de olor a esencia de trementina…..mis fosas inspiran lo que sobra del lienzo….y todo se torna difuso…
Me levanto y sigo…..trato…. pero las palabras florecen de mi cavidad cerebral y piden a gritos ser plasmadas en algún lado….no se conforman con volar alrededor mío, no….
Algunas se posan en mi pintura….otras en mi pelo…pero solo las mas atrevidas salen por la ventana hasta vaya a saber uno qué almohada!
Tomo el pincel y sigo cargándole óleo hasta su punto máximo……….
Y amontono, separo, reviso, tacho, lloro, grito, pateo, escupo, me detesto en violetas y azules monótonos…
Descanso…
Respiro…
Medito…
Fumo… (en este ambiente inflamable)
Y otra vez la divina comedia…
Ya mi cabeza está a punto de estallar del dolor…
Mucha trementina….
Casi…
Un hilo agudo de sonido se filtra por todo mi cuerpo…
Pero no trato de huir…
Permanezco…
Me ahogo…
Como en arenas movedizas, saco mi cabeza afuera, ayudándome con las poca fuerzas que me quedan…
Experiencia digna de ser contada….
Y repetida por los oyentes…

Ahí...

En ese preciso instante, todas las olas se alinearon ante mí...

Y ahí estabas, sentada a mi lado...

Tu presencia no me causó ningún asombro.

Menos que menos, que volvieras sin que yo te lo pidiera de rodillas.

Casi piedra. Casi sal. Casi credo. Casi gaviota.

Y se hizo carne tu rutina...

Tu presente se desvaneció por completo.

Te levantaste y huíste.

Me dejaste con la palabra en la boca.

(Como puta costumbre)

Sólo tú hablaste.

Yo aía... y miraba...

No sos para nada creativa ni revolucionaria...

No defendés lo que querés...

Ya no me sorprendés.

No te voy a extrañar. En lo más mínimo.

Suerte en tu estadía nómada.

Hongos...

¡Te ví!

No te escondas!!!!

Por favor...

No te escondas de mi...

No te encojas y huyas debajo de los hongos...

Yo te oigo...

Yo te siento...

¡Te veo!

Estás ligada a mi...

(y yo a vos)

Esta vez no te van a salvar ni 500 berrinches...

SOS MI SOMBRA...

Aunque no quieras...

(aunque no quiera)

Sobredosis inoportuna...

Me mande al súper como quien se tira a una pileta con todas sus ganas….
Pero me olvidé de un detalle: nunca supe nadar….
¿Agua? Por supuesto que había agua….estaba hasta el borde, sin mucho olor a cloro y el sol me acariciaba dulcemente…..pero no….no era verano….
Era invierno…..
Naturalmente, apenas me sumergí, mi piel se fue tornando violácea, y las pataditas para salir a flote que me enseñaron esa única vez que fui a la colonia, obviamente no sirvieron de mucho…
Lentamente me perdí entre las góndolas de especias…
Resurgí en la de artículos de limpieza…
Para luego hundirme en la de golosinas….
Viajé por todos los chocolates habidos y por haber, caramelos y demás…
Hasta que sentí una cachetada dolorosa…
Pensé que era un guarda vidas que me había salvado de mi prematura muerte, pero al lograr abrir los ojos, toda esa imagen se desvaneció por completo.
Era un repositor de mercadería, rodeado por cinco o seis chinos que vociferaban y se agarraban la cabeza….
estaba la Pocha con otras viejas, y no paraba de susurrar:- esta chica esta poseída… (Vecinas viejas y chusmas)
Cuando me pude incorporar tratando de no escuchar todas las pavadas que decían, me percaté que estaba tirada sobre vaya uno a saber cuantos envoltorios vacíos de golosinas, y mis manos y ropa, todas manchadas de chocolate….
Mi cabeza empezó a girar, y ahí recordé todo….
Había ido al súper a comprar toallitas, pero se ve que mis hormonas necesitaban una dosis urgente de dulces…Pileta, sol, invierno, ovarios, dulces, chinos, vieja chusma, flotar, olvidar…
-Paga golosinas!!!! Paga!!!!!
Lo lamento querido chino….No traje plata….$4 de las toallitas…Pero las golosinas…A eso no lo manejo yo….Lo manejan mis hormonas….

Modelada en arcilla...

Te modelo una y otra vez...

En arcilla colorada...

En arcilla blanca...

Logro un parecido...

Preparo los moldes...

Los abro...

Empiezo a picarte,

con martillo y cortafierro...

Y en el último minuto,

ya cuando casi te veo por completo,

te rompes en mil pedazos...

...Empiezas a llover...

Y me mojas...

He perdido

la única prueba de existencia que tenía en mí...

Palma....

Postes sostienen mi agua...

Calma de día...

Turbia de noche...

...Clara...

Llena de peces en mi vientre...

Enriedo mis fondos con algas y caracolas...

Me seco de a ratos...

Dulce...

Culmino en tu mar...

Tu mar lleno de estrellas y lunas...

Autocapturada...

Cada vez que me asomo a mí misma, mi sombra huye despavorida...

Pobre...

No se acostumbra a mi rostro de mujer feliz...

Cimientos...

Algo en mí se ha derrumbado...

Suerte que quedan mis cimientos...

Amapolas....

Ayer me ví morir...

Hoy renazco en suelos fértiles...

Tierra negra y virgen me acuna...

Broto...

Vivo en amapola...

Ya florezco...

Mañana seré sólo polen y semilla...

Autoestima en noche de verano...

Me siento sobre mi soledad y descanso en su suave pelo...

(Sus raíces hinchadas por el agua)

Lentamente me transformo en dolor de cabeza y en rulo...

Paraná...

Orillas infinitas me envuelven en su bruma fría... casi congela mis extremidades, pero la esencia del infinito me acuna al mediodía. Es el arte de viajar. De disfrutar esos instantes mágicos que depara nuestro fiel destino. Amigo cruel y sincero, guíame a esos horizontes intangibles del alma, sin anestecia, pero con ternura de abuela loca...

Y las hojitas secas tiritan bajo mis pies entumecidos entre el ambiente.

Comparto mis puntas florecidas y mis dedos alienados, entre risas y nubes de humo...

Raíces...

...ellas me anclaban hasta ayer...

sólo hasta ayer...

De a poco, están saliendo a la luz. 

Ya son libres y ven el sol...

Por más que trate de alcanzarte, ya la tierra debajo de nuestros pies está reseca...
No bajaré los brazos... respiro en paz. Esta vez, mi sombra hace de guía...

Girando sobre mi sombra...

Tu vejez golpeó mi cara.

Casi sin darme cuenta, ví cómo tus arrugas te ocultan la vida.

(...me da miedo pensar en tu futura ausencia...)

Tus ojos ya no brillan con aquél éxtasis...

Tus palabras ya no son tan tibias y apañadoras...

¿Quién me hará dormir cuando esté enferma?

¿A quién le preguntaré las cosas del pasado?
¿A quién pelearé con amor?

...con éste amor que nos une los unos con los otros...

Por lo pronto, me hago la tonta...

...no quiero asumir lo que ya está dado...